sábado, 4 de febrero de 2012

3.1.1. TECNOLOGÍA Y COMUNICACIÓN

PRINCIPIOS DE APLICACIÓN DE LA TECNOLOGÍA EDUCATIVA CON ALUMNOS CON DISCAPACIDAD MOTÓRICA

Nuestro actual sistema educativo pretende dar respuesta a las necesidades educativas del alumnado, y una de las multiples medidas para ello son las adaptaciones en los elementos de acceso al currículum. Dichas adaptaciones consiste en modificaciones o provisiones de recursos espaciales, materiales o de comunicación, que facilitan a estos alumnos el desarrollo del currículum ordinario o, en su caso, de un currículum adaptado.
Pero ahora bien, la modificación o provisión de estos recursos materiales que van a favorecer el acceso al currículum, se deben organizar y seleccionar en base a unos criterios, como son, principalmente:
  • Determinar la provisión de los recursos centrándonos en las posibilidades del alumno y no en sus dificultades.
  • Los materiales de elaboración propia suelen ser más educativos y formativos que los comprados, pues se adaptan a las necesidades concretas de nuestro alumnado y a nuestras intenciones educativas.
  • El material debe ser rentable, que pueda aprovecharse para finalidades diversas siempre que sea posible.
  • Que no sea excesivamente sofisticado, que esté al alcance de los centros y tenga un alto grado de conservación.
  • No marginar las nuevas tecnologías, ya que ocupan un papel muy importante en la educación de los alumnos con necesidades educativas especiales derivads de discapacidad motórica.
Centrandonos en las nuevas tecnologías, podemos hacer referencia a una serie de principios para el establecimiento y aplicación de las ayudas técnicas para estos alumnos con discapacidad motórica:
  • Las ayudas deben diseñarse y proporcionarse pensando en las que son necesarias y adecuadas a un determinado nivel de desarrollo.
  • Las ayudas deben ser resistentes y de poco peso.
  • El uso de ayudas requiere un cierto nivel de atención, retención, memoria y capacidad intelectual.
  • El alumno deberá estar motivado para el uso del aparato.
  • El uso de estas ayudas debe conribuir a dar cumplimiento al principio de normalización, y facilitar la integración social del alumno.
  • Estas ayudas deben favorecer la individulización de la enseñanza, adecuando las tareas al nivel de competencia del alumno y a su ritmo de aprendizaje.
  • El uso de estos aparatos deben aumentar el grado de autonomía e independencia personal del alumno.
Pero es fundamental tener en cuenta que, además de los aparatos, y más importante que ellos, es la actuación docente eficaz de las técnicas adecuadas.

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